Texto y fotografía: DAVID MELÉNDEZ
Y que la mixología nos lleve a trascender más allá de un simple cóctel.
Con lo anterior como idea primigenia, Alquimia, el Primer Festival de Mixología que tiene lugar en Guadalajara, se llevó a cabo con un éxito inusitado y sobre todo avasallador. De entrada, el spot elegido fue todo un nuevo descubrimiento, ya que se trató de El Viñedo, perímetro que es toda una vivencia expansiva como lugar especializado para eventos sociales y que fue acondicionado de forma puntual y perfecta para recibir a miles de personas a lo largo de 48 horas para que disfrutaran, sí, no se vayan a asustar, de alrededor de 400 cócteles. Sí, quizá todo un exceso en el sentido lato de la palabra pero también un signo inequívoco de la bonanza que se vive en México en materia de empatar licores, alcoholes o espíritus alcohólicos infusionados por parte de todos aquellos mixólogos, con base en el gusto y paladar de los más diversos criterios y paladares.
Claro, estuvieron todas las principales marcas de licor debidamente establecidas y ofreciendo sus coloridas y llamativas propuestas, pero también aquellas que representan un segmento naciente y por demás atrayente, que si lo bien son más bien artesanales y poco comerciales, ya tienen un segmento cautivo de personas que fueron directamente a sus stands para catar lo que estaban ofreciendo para Alquimia, este festival que presentó Vinos América y que seguramente quedó en la memoria y psique de todas las personas que asistieron este pasado 4 y 5 de octubre.
Pero Alquimia, el Primer Festival de Mixología en Guadalajara no fue sólo materia etílica, sino que se confabularon gastronomía, música y talleres. Sí, talleres donde se presentó lo mismo una master class de la ginebra The Botanist 22, que una amena charla cortesía del famoso anís francés Pernod titulado Abre tu Bar, que con el título dice más que mil palabras y que Abraham Delgado, uno de sus representantes de marca, hizo de forma maestra y por demás amigable.
En torno a la música, los tímpanos fueron llenados por Drumpet, ese dúo de féminas originarias de Ucrania que, por alguna razón inusitada, han decidido hacer carrera en México. Ellas dos, batería y trompeta y que hacen covers de sendos éxitos masivos actuales y uno que otro consagrado, fueron las que pusieron el primer punch de baile y energía de la tarde. También estuvo el combo Los Póker Jazz Party, que pusieron a bailar a todos los presentes con su ecléctica mezcla de hits de toda la vida y covers para mantener la fiesta viva toda la noche. También estuvo Nico Infante con su tributo a Soda Stereo y todo lo anterior tuvo lugar en el llamado Stage 2, mismo que permitió el baile y la sana convivencia.
Aquí cabe destacar que Alquimia, estuvo separado en una amplia zona de comida, un salón especial para todos los talleres, una inmensa, pero inmensa-inmensa zona de coctelería, donde en un extremo los asistentes tenían acceso a otra gran barra de tragos largos, un stand de barra al fondo larguísimo y por demás envolvente y, claro, el área social, donde también se encontraban las cajas de canje para obtener cualquier trago, sin faltar el espacio idóneo para socializar sin medida ni parámetro.
Entre las marcas participantes estuvieron, entre otras, Jameson, Martell, Tequila Hornitos, Jim Bean, Beefeater, el famoso ron Havana Club, Suntory Whisky, Absolut, Bacardí, Tequila Patrón, Tequila Don Julio, Boodles Gin, Maker’s Mark, Mezcal 400 Conejos, The Botanist, Pernod Ricard, y Creyente Mezcal, entre muchos otros. Todas estas marcas tuvieron cócteles especiales y que hicieron las delicias de todos los presentes. Por ejemplo, Martell preparó el llamado Sidecar, que lleva, aparte de este famoso cognac en su versión Blue Swift, Triple sec y un twist de limón. A su vez, el vodka Absolut presentó, por ejemplo, el llamado Spice Swedish, que llevó Absolut azul, Aperol infusionado con mango, jarabe de especias y juego de limón verde, mientras que Zacapa, ofreció un Honey Mojito verdaderamente estruendoso, con hierbabuena, jugo de limón, agua mineral y su Ron Zacapa Ámbar. Además, hubo un show exclusivo de eso llamado flair bartending, por el ucraniano Alexander Shtifanov.
Sin lugar a dudas, Alqumia llegó para quedarse y toda la dinámica de su concepción fue extremadamente bien recibida por el público. Esperamos que para 2020 esté más que listo para conquistar de nueva cuenta todos los paladares etílicos de Guadalajara y zonas conexas, porque pocas veces se han tenido este tipo de festivales tan bien organizados y por demás rectos y contundentes.
¡Larga vida a al Primer Festival de Mixología en Guadalajara y que lleva por nombre Alquimia!