*Una gran noche de bella música se vivió el pasado fin de semana con una amplia gama de polifonías atestando la Sala 2 del Conjunto Santander para revivir los clásicos de Vivaldi
La Orquesta de Cámara Higinio Ruvalcaba (OHIR), interpretó un exquisito programa del Veneciano más Universal que la música vio nacer, y hablamos sin lugar a dudas de Antonio Vivaldi, también conocido como «el Cura Rojo«, debido a su formación como sacerdote y del color de su cabello.
De entre las tantas obras que han llegado a nuestros días del gran Vivaldi (realizadas mayormente entre 1723 a 1740) la OHIR preparó un programa que relata un ambiente devoto de lo celestial, una esencia que hasta el día de hoy nos ilusiona a imaginarnos en las místicas y carnavalescas tierras del Véneto.
Escuchar los clásicos siempre será una experiencia que desborda emociones; es inevitable no caer en un continuo periplo de ilusiones que en época fue la moda de lo cotidiano.
El dúo de Guitarras Medina-Gracián (Sergio Medina y Ernesto Gracián), cuya amplia trayectoria también deleitó con su ejecución. La obra fue originalmente escrita para dos mandolinas y orquesta de cuerdas que, con el tiempo, se ha vuelto de las interpretaciones barrocas más populares entre los guitarristas y por el público.
La unión de ambos músicos plasmó, para este programa tan especial, esa sensibilidad y pasión por explotar la enorme riqueza musical que se puede extraer al ensamblar ambos instrumentos. En lo particular fue muy bello presenciar la ejecución de ambos solistas, tan nostálgico como ver conversar a dos grandes amigos, en estrecha confianza uno preguntando y respondiendo, proponiendo un acorde y colocando el ritmo y otro acompañando y complementando con armonía. Esa es la magia del dúo.
El programa fue el siguiente:
A. Vivaldi: Concierto para cuerdas en Sol menor, RV 157, Allegro, Largo, Allegro
A. Vivaldi: Concierto para dos guitarras en Sol mayor, RV 532, Allegro, Andante, Allegro
I N T E R M E D I O
Federico II «El Grande«: Sinfonía núm 2 en Sol mayor, Allegro, Andante, Presto
A. Vivaldi: Sinfonía núm 1 en Do mayor RV 719, Allegro (non troppo), Andante, Presto (Allegro)
A. Vivaldi: Sinfonía núm 2 en Sol mayor RV 146, Allegro (moderato), Andante – Vivace, Allegro (Tempo di Minuetto)
Tras el breve intermedio se ejecutó la obra de Federico II «El Grande», el rey músico y filósofo, protector de la cultura y las artes bajo su reinado. Dicho sea de paso su obra, que ha perdurado a través de los últimos trescientos años, se apega mucho al estilo de las sinfonías que se interpretaron a continuación obras también del veneciano.
Hacia el cierre del programa, seejecutaron un par de pequeñas sinfonías de Vivaldi,una vez más con roces musicales más marcados hacia el final del barroco que las distingue predominantemente dentro del género clásico.
El siguiente programa de la OHIR que será el número ocho de esta temporada y serán representadas obras de Marón, Turina, Corelli, Mozart y Bartók y tendrán lugar en el mismo recinto el próximo sábado 23 de septiembre.
Texto, Fotografías y video: Alejandro Guerrero