Encabezados por Panteón Rococó y Salón Victoria, una mezcla de ska, reggae, cumbia, punk y rock, fue lo que se vivió en el primer World Beat Music Fest la noche del sábado 18 de mayo en la Calle 2
Marcaron las 19:00h, y como había sido anunciado, Huarache, proyecto rebelde que mezcla el reggae con letras contestatarias, subieron al escenario fungiendo como anfitriones, ante una tarde sumamente soleada, mientras que la Calle 2 comenzaba a conglomerarse iniciando la fiesta “worldbeatera”, que se espera sea la primera de muchas.
Una de las bandas más queridas para los jaliscienses sin duda es La Celestina, combo que ya ronda los 25 años y que ha sabido marcar su legado con temas como “Chuka el pescador”, “Fiesta del mundo” y “Par de huaraches”, mismos que fueron entonados de principio a fin por todos los tapatíos que seguían calentando los motores para lo que se venía.
Aunque no eran el plato fuerte, el Salón Victoria regresó después de siete años de ausencia domando inmediatamente a los presentes con su mezcla de ska, swing, surf y rock, al ritmo de “Nasty uncle hippie”, “Mil coyotes mariguanos”, “Corazón contento”, “La noche estaba puesta”, “Mi vida es tango”, “Si tu boquita fuera” y la representativa “Sol de medianoche”, poniendo a batir el chocolate a quienes añoraban su regreso. Ahora, encabezados por su líder Checo Mendoza, fundador y propietario de la agrupación, demostraron que siguen con el poderío que los caracteriza, dejando sedientos a su fiel legión y prometiendo volver pronto.
Una de las complacencias para todos los presentes fue la proyección del clásico mexicano entre las Chivas rayadas del Guadalajara y las Águilas del América, en una pantalla lateral que mantuvo sentados a cientos de aficionados para ver la disputa que fue victoriosa para los “Azulcrema”, llevándose el marcador 1-0, y dejando a los “Chivahermanos” con un mal sabor de boca.
El ánimo no paró y el vaivén entre bandas tapatías y las de CDMX, prosiguió de la mano con The Real Mama (antes Grand Mama), viejos lobos de la escena “reggaesera” en Guadalajara, poniendo a bailar con su fusión de ritmos latinos y las clásicas “Ya pasará”, “No más”, “Cayha”, “Ay, dolor” y el cover de El Personal, “Dale de comer al conejito”.
La puntualidad y la organización fueron los ingredientes principales de este primer festival, a las 23:00h, el Panteón Rococó y su frontman el Dr. Shenka, salieron a escena energizando de golpe a los asistentes al ritmo de “Dime”, “Esta noche”, “Cúrame”, una nueva versión de “Marcos Hall”, “Buscándote”, “Vendedora de caricias”, “Estrella roja” y las infaltables “La dosis perfecta” y “La carencia”, dando el broche de oro después de seis horas de música, baile y mucha fiesta, dejando un saldo blanco y la satisfacción de los asistentes.
Texto: Eduardo Roel.
Fotos: Salvador Tabares.