*El argentino se presentó por primera vez en Guadalajara con un corto recital prometiendo volver en este mismo año

Florián Fernandez Capello, mejor conocido simplemente como Florián, hijo de Vicentico, ambos integrantes de Los Fabulosos Cadillacs, se presentó por primera vez con su proyecto solista, ante una improvisado y afortunado encuentro que quedará para la memoria de unos cuantos.

Dieron las 21:35 h, cuando las cómplices que acompañan al argentino se montaron en la batería y en el teclado, para dar inicio al corto pero acertado recital que introducía a la noche entre aires de tango y cumbia con la “Herencia” como opening” y “Carta para vos”. Vestido de negro, tenis blancos, su tatuaje de “Familia” en el brazo derecho y abrazado al bajo, dirige “Buenas noches, amigos, amigas. Gracias por estar, un placer”, prosiguiendo con “Ojalá fuera ficción”, agradeciendo por estar acá y el esfuerzo de asistir a las casi cincuenta personas que se entregaron desde el inicio al show.

El dueto con Feni Colina quedó evidenciado en “Condenada”, despertando una ola de palmas y el baile entre los presentes, antes de llegar al estreno de “Porcelana”, último sencillo lanzado en este mes de marzo. Florián ofrece un brindis y cierra el set con “X amor”, nombre de hasta hoy su única placa discográfica.

Una de las sorpresas de la noche fue mostrar su fase instrumentista, quedándose solo ante las teclas para recitar “Nada” de Julio Sosa y “Como dos extraños” de Roberto Goyeneche, para después mostrar sus dotes a capela con “Fueron tres años” de Argentino Ledesma, cerrando el bloque de clásicos tangos.

El beat regresó con “Tengo miedo”, donde retomó su inseparable Telecaster. La balada que grabara con Zoe Gotusso, “Todo mi amor se fue”, anunciaba el final de la noche, pero la improvisación característica de Florián, hizo que regalara el “Llorón”, la cual no tenía preparada, concluyendo el encuentro con su hit por excelencia “TKM” y su primer lanzamiento solista “La fe”, prometiendo volver en este mismo año.

Texto: Eduardo Roel                                 Fotos: Alex Legba