* El festival que llueve truene o relampaguee sigue siendo el evento por excelencia para la ciudad de Chicago
Rob Zombie
El Riot Fest es ya un evento clave del encanto turístico de la histórica ciudad de Chicago. Este año, se registró otro éxito rotundo a pesar de los cambios de locación que sufrió de último momento, pues se realizaría originalmente en el Seat Geek Stadium y al final regresó a su casa, por más de diez años, el Douglas Park.
Este año, su concepto evolucionó con la propuesta Riot Land que tomó la esencia de una feria que, aunque ya era característica del festival, lo multiplicó en esta edición. Otro de los cambios que se vio fue en la imagen gráfica general del festival, así como del acomodo de los escenarios y sus nombres:
- Cabaret Metro Stage
- AAA stage
- NOFX World
- Rise Stage
- Radical Stage
De ahí en más, la esencia pura de amar la música alternativa sigue intacta, si no que hasta expandiéndose un poco más teniendo una gran peso aunque en la edición del año 2023 el line up fue uno de los más aclamados de su historia.
Este año los organizadores trajeron grandes actos, destacando entre los principales:
- Fall Out Boy
- Slayer (reunión especial)
- Pavement
- Beck
- Rob Zombie
- Sublime
- Public Enemy
- The Offspring (interpretando Smash)
- St. Vincent
- Bright Eyes
- The Marley Brothers
- Dr. Dog
- NoFX despidiéndose de los escenarios.
- Lamb of God
- Mastodon
Todo esto repartido a lo largo del fin de semana, con días que estuvieron bajo el sol a todo lo que daba y el calor incesante. Sin embargo, esto no impidió a nadie dejar de disfrutar todas las amenidades del festival en el que hubo hasta lucha libre.
Destacó la presencia de las mexicanas de The Warning con con un set muy eléctrico y un gran recibimiento por parte del público latino y estadounidense, especialmente porque es uno de los primeros grupos mexicanos en ser invitados al festival en su historia, todo un hito para su carrera y el rock nacional.
The Offspring presentó todo el álbum de Smash y también una presentación muy emotiva fue la de Fall Out Boy que tuvo como invitado ak vocalista del grupo de punk rock Rise Against y que finalizaron hasta con fuegos artificiales. Algo no muy común pero siempre bienvenido.
El domingo comenzó muy lluvioso a diferencia de los otros días. Esto representaría un retraso en la apertura de las puertas del festival pero, afortunadamente, no fue así. Mojados pero con mucho ánimo el festival estaba llegando el público donde disfrutaron, metal de buena calidad.
La banda de Trash Metal Nekrogoblikon, con todo y su duende como vocalista, fue un show potente y divertido. De esos grupos que no se toman muy en serio pero sus guitarrazos sí que lo son.
Mastodon y Lamb of God fueron casas de puro poder en toda la extensión de la palabra. Mastodon tocó su disco insignia completo, Leviathan, el mismo que lo llevó al estrellato. Las guitarras poderosas volaron la cabeza a los asistentes acompañados de lanzallamas, la cereza del pastel.
GWAR, banda fundamental en el inventario del festival, es muy querida por la gente por toda la parafernalia que traen y el espectáculo que ofrecen. Estuvieron en uno de los escenarios principales armando gran fiesta bañando de sangre falsa, como ya es costumbre a todos los fans.
Rob Zombie fue de los atractivos del festival con una producción impecable y espectacular. Como en sus películas, hubo mucha parafernalia de películas de terror y hasta botargas enormes para complementar lo espectacular que estuvo.
NOFX, tuvo su propio escenario, donde a lo largo del festival estuvieron tocando sus bandas amigas. Cerraron el escenario los tres días como parte de su gira de despedida por 40 años de trayectoria, un momento muy emotivo.
Los de Slayer se reunieron por ocasión especial al festival después desde su despedida en el 2019 para deleitar a sus fans con un escenario más blasfemo, si eso fuera posible, y un espectáculo de con fuego que superó todo lo que se vio en el festival.
Otra edición que cumplió al máximo todas las expectativas de todas y todos los asistentes. El Riot Fest, sigue creciendo cada año en el corazón de sus asistentes ya convirtiéndolo en uno de los eventos más importantes de la ciudad de Chicago.
Texto y fotos: Alejandro Becerra