*La fiesta más esperada llegó acompañada de una dosis de nostalgia en la que se disfrutaron de los éxitos más icónicos de una generación
El pasado viernes 18 de octubre el Guanamor Teatro Studio se transformó en un epicentro lleno de nostalgia. Desde tempranas horas, cientos de personas comenzaron a darse cita en el lugar portando diversas playeras de series, caricaturas y artistas que marcaron a toda esa generación, pero también hubo otros que recrearon los vestuarios más icónicos de programas como Drake & Josh, los Padrinos Mágicos, entre otros.
Con un recinto inundado a tope de emoción, cerca de las 19:30 hrs el escenario se iluminó y entre una ola de gritos apareció la talentosa dj “Mochi” que fue la encargada de inaugurar esta increíble celebración, contagiando a todos los presentes de una energía inigualable.
A las 20:15 hrs surgió en la pantalla la cuenta regresiva y cuando esta llegó a cero Matt apareció en la tarima haciendo vibrar a los miles de fanáticos que se dieron cita, transportándolos en un viaje de recuerdos de infancia y juventud con su repertorio lleno de éxitos.
La conexión entre Bennett y sus fans era más que evidente ya que buscó en todo momento acercarse a ellos para interactuar durante todo el evento, sin duda uno de los momentos más esperados fue cuando el dj subió por tres rondas a diez seguidores al escenario disfrutando y bailando a su lado las canciones más emblemáticas de Nickelodeon.
Sin duda alguna la energía fue la protagonista de la noche, los tapatíos no solo corearon a todo pulmón las canciones sino que también recrearon los pasos de las coreografías de Hannah Montana, HSM y Teen Beach Movie.
En la recta final mencionó que durante esa parte del show suele poner temas de One Direction pero que en esa ocasión él bajaría del escenario para estar con el público y dejarle el escenario a Liam como homenaje a su reciente partida, convirtiéndose en uno de los momentos más lindos de la velada.
Tras poco más de dos horas la Party 101 llegó a su fin, sin duda este evento quedará grabado en la memoria de todos los presentes debido a que fue más que un viaje musical.