El músico tapatío se reencontró con sus seguidores para presentar su 00:00 Tour, en un concierto bastante emotivo
Entre la búsqueda de estacionamiento, la llegada rápida, el cúmulo de fans, músicos, periodistas y medios de comunicación, se daría inicio al anunciado soul out que el cantante jalisciense lograría por primera vez en el Auditorio Telmex.
Después de que el reloj en pantalla marcara 00:00, como es nombrado el tour, dieron las 21:00 horas y como caída de agua fría, pero en versión imperiosa, comenzó “No es antes ni es después”, el tema que cierra la última placa discográfica del tapatío, que de manera protagónica se apoderó del escenario en cuestión de segundos, emitiendo en medio de la euforia: “Buenas noches Guadalajara”, imponiéndose ante este recinto puesto de pie desde el principio.
Raúl Velázquez (guitarra), Erick “Oso” Rangel (sintetizador y teclados), Alejandro Chubaka (bajo) y Luis Mejía (batería), fueron los vaqueros que darían soporte a una noche mágica sonora. Una pantalla gigante al centro y dos a los lados, un juego de luces frías y miles de almas, serían los ingredientes primordiales para lo que Siddhartha ofrecería, sumando el amor, la luz y la unión, que caracterizaron una velada agasajante.
“80 días” y “Película (cap. 3)”, donde se proyectaban carretes de cinta, permearon de manera declaratoria: “Un placer tocar en casa, venimos a dejar toda nuestra energía y nuestro amor para ustedes”, dijo el multiinstrumentista, antes de “Ser parte” e “Infinitos”, para pasar a “Fuma”, el featuring que realizara con los Technicolors Fabrics y que destacó por la parte final en el bajo de Chubaka.
De pronto llegaron los “Huracanes” y la dedicatoria amorosa a su esposa, la youtuber Yuya, con “Cardúmenes”. La voz de Ana Torroja en “Mapa” fue sustituida por la participación de Eunice Guerrero, cantante de los anfitriones Valsian. “Buscándote (cap. 7)”, un baile desatado en “Náufragos” y “Bacalar”, serían apenas la mitad del show donde nadie ocuparía su lugar.
Lo más coreado de la noche llegó con “A la distancia”, tema que se impregnó por las luces de los celulares haciendo un momento especial. En Siddhartha predominó su guitarra acústica y “El chico” se hizo acompañar por todo el auditorio completo, misma que se conectó con “Me hace falta” y “Suburbios”, en la que destacó el sonar de la trompeta.
“El amor es la parte más viva”, declamó con un “Respiro”, “Paraíso lunar”, “Tarde” y “Algún día (cap. 1)”. La demanda de aplausos perduró en “Loco”, en la que destacó la presencia del obregonense Caloncho. Luis Mejía se llevó la noche al pedirle matrimonio, de rodillas y a través de la pantalla a su novia Itzia Aranda, “¡Que viva el amor, Luis!”, fue la felicitación del líder, rematando con “Brújula”.
La espera no importó, las ansias de ver al mariachi en el escenario eran la cereza del pastel, “00:00” y “Únicos” sonaron de manera elegante dejando satisfecho al ente que se hizo presente para semejante manifestación sonora.
Por Eduardo Roel.
Galería fotográfica: Alex Monroy.