La Sala Plácido Domingo del Conjunto Santander lució en su máximo esplendor en una noche decadente
Se llevó a cabo la primera de tres fechas que Los Auténticos Decadentes establecieron en nuestra ciudad para festejar tres décadas y media de su trayecto musical. Como era de esperarse el sold out era inevitable.
Dieron las 21:15 hrs, y la banda bonoarense, conformada por trece músicos en escena, despuntaba con «Somos», «Cómo me voy a olvidar», «Pendeviejo», «Los parlantes» y «Los Piratas», mismas que pusieron a la tribu tapatía de pie desde un inicio, tras la espera de dos años de ausencia desde aquella presentación de su MTV Unplugged.
«Muy buenas noches, los extrañamos mucho, bienvenidos una vez más a la auténtica decadencia», emitió «Cucho», vocalista y frotman principal del combo argentino, quien daba paso a la voz del viejo Jorge «El Perro» Serrano con sus clásicas «Corazón», «Diosa», «Viviré por siempre», «Amor» (dueto con Mon Laferte) y «Golpes en el corazón», esta última interpretada al lado de Natalia Lafourcade e incluida en su más reciente Ep ADN (Capítulo A).
Llegó el turno de Diego Demarco, guitarrista principal, para interpretar «La prima lejana», «Besándote» y «El Gran señor», una trilogía característica de su voz.
De pronto «Cucho» vuelve a escena y continúa con «Viejos vinagres», «Sigue tu camino», «La bebida el juego y las mujeres», «Raquel» y «El Murguero», un bagaje sonoro lleno de ska, rock, murga y folclore que no dejaron que ningún asistente se apaciguara.
En una fiesta decadente nunca falta el momento romántico, pero a la vez dramático, y un «Osito de peluche de Taiwán», que lució con un «Capanga», a corbata y texana, soplando como nadie la trompeta; «El pájaro vio al cielo y se voló» con un Diego Demarco haciendo llorar a su Less Paul tinta; «No me importa el dinero» a dueto virtual con Julieta Venegas; y «Oro», su último sencillo, clásico de la agrupación mexicana Bronco, que ahora suena a un auténtico rocksteady, lo confirmaron.
«Jurabas tú», «Ya me da igual», «Beatle», en la cual subieron a un niño a cantar toda la canción, prendió el baile que proseguía con «Skabio», «Gente que no» y «La guitarra», donde «El Francés», percusionista y animador decadente, hizo gala de su traje de bombero bañando con una manguera a toda la multitud que pedía más, cerrando así la auténtica fiesta.
El encore era inevitable, y Gustavo Montecchia, guitarrista fundador, regresó al escenario de manera acústica acompañado de Pablo «El Flaco» Rodríguez en el saxofón, para regalarnos «Loco», un dueto del «Perro» Serrano y el público tapatío. «Siga el baile» y «La banda sigue», pusieron a ondear la bandera mexicana en las manos del «Francés», que ponía el sello final a esta primera cita.
El día de hoy y mañana serán los próximos encuentros de está trilogía decadente, aún se encuentran algunos boletos a la venta.
Por Eduardo Roel.
Galería fotográfica: Lags Gómez Sandi.