Cualquier sorpresa, es bien recibida aunque sea intangible al tacto.
La Filarmónica de Jalisco, acaba de arrancar su Tercer Temporada 2015 y lo hizo de una forma especial porque su primer programa llevó por título El Arte Orquestal en Hollywood: Star Wars y Súper Hits de John Williams.
Dicho concierto dominical que arrancó escasos minutos después de las 12:30 horas, estuvo expresamente dedicado a la creatividad del compositor estadounidense John Williams, y ofreció un programa variado de sus más famosas composiciones para el mundo de Hollywood.
En esta ocasión la batuta estuvo bajo la orden del director invitado, Dorian Wilson, que dirige frecuentemente la Orquesta Filarmónica de San Petersburgo. Su ataque ante las piezas de Williams fue acentuar las secciones de metales y generar una tensión más que evidente en cualquier tutti, así como matizar bien la síncopa propia de cada obra. A pesar de que la sección de metales por momentos cometió evidentes yerros y fueras de tono momentáneos, el desempeño de la orquesta fue sobresaliente.
Quizá destacaron más los temas de «Danza del diablo» de Las Brujas de Eastwick y la «Marcha de los cazadores» de Cazadores del Arca Perdida, por su gallardía y penetración en la psique colectiva; de hecho, no hubo quien no se conmoviera al escuchar esos primeros compases tan propios de las aventuras de Indiana Jones. O incluso esa marcha tan carcaterística del tema para la cinta de Superman que, literalmente, puso a brincar a todos dentro del Degollado. Además, fue evidente que muchos niños se emocionaron como desquiciados, porque al terminar cualquiera de las obras, muchos gritaban un sonoro «¡bravo!» como desaforados. Por si fuera poco, para interpretar los tres movimientos del tema de La Lista de Schindler, estuvo el violín solista del maestro venezolano Iván Díaz, que recibió uno de los aplausos más sinceros de todo el programa.
Como dato curioso, este concierto tuvo mucha asistencia de jóvenes y pequeñines porque se programó completa la primera suite de Harry Potter y la Piedra Filosofal, además de la suite entera de Star Wars, que fue el cierre perfecto para que la Filarmónica de Guadalajara recibiera un fastuoso y estruendoso aplauso y vitoreo con todo el público de pie.